Adoración al Santísimo Sacramento por la santificación de los sacerdotes y el aumento de vocaciones sacerdotales

San Juan María Vianney adorando al Santísimo Sacramento

El jueves cuatro de agosto, con motivo de la festividad del sacerdote San Juan María Vianney, el Santo Cura de Ars y Patrono de los Párrocos, se celebrará una solemne adoración al Santísimo Sacramento en la Iglesia Parroquial de San Nicolás de Bari a las 19:30. Adoraremos al Señor Sacramentado para rogarle por la santificación de los sacerdotes y el aumento de las vocaciones al sacerdocio.

Retrato del Cura de Ars

SAN JUAN MARÍA VIANNEY

Nació en 1786 en Dardilly, fue el tercero de seis hermanos de una familia campesina. Sus padres, granjeros, se preocuparon por su formación religiosa a pesar del clima de persecución de la Revolución Francesa. Desde pequeño manifestó su vocación sacerdotal, pero su fracaso estudiantil parecía impedir su sueño. Aunque era de inteligencia mediana y sus maestros nunca parecen haber dudado de su vocación, sus conocimientos eran extremadamente limitados. Dispensado del servicio militar al aspirar al sacerdocio, sin embargo es obligado a ingresar en el ejército en 1809. Un año después, a pesar del peligro, deserta para continuar su carrera al sacerdocio. En mayo de 1810 recibe la tonsura e ingresa en el Seminario. Logra su ansiada meta el 13 de agosto de 1815, cuando es ordenado sacerdote por el obispo de Grenoble.

Monumento en Ars para recordar la llegada del Santo Cura

Nombrado coadjutor de Ecully junto a su querido párroco Balley, en 1818 es destinado a otra parroquia. La elegida es la aldea de Ars. Fue en el ejercicio de las funciones de párroco en esta remota aldea francesa en las que se hizo conocido en toda Francia y el mundo cristiano. Algunos años después de llegar a Ars, fundó una especie de orfanato para jóvenes desamparadas.

Confesionario del Santo Cura en Ars

Pero la principal labor del Cura de Ars fue la dirección de almas. No llevaba mucho tiempo en Ars cuando la gente empezó a acudir a él de otras parroquias, luego de lugares distantes, más tarde de todas partes de Francia, y finalmente de otros países. Durante los últimos diez años de su vida, pasó de dieciséis a dieciocho horas diarias en el confesionario.

Vista de la Iglesia Parroquial de Ars y de la Basílica

Su consejo era buscado por obispos, sacerdotes, religiosos, jóvenes y mujeres con dudas sobre su vocación, pecadores, personas con toda clase de dificultades y enfermos. En 1855, el número de peregrinos había alcanzado los veinte mil al año.  Murió el 4 de agosto de 1859. Sus restos mortales se conservan incorruptos en el gran santuario dedicado a él en Ars, el pequeño lugar al que dedicó su vida como sacerdote y donde falleció.

Cuerpo incorrupto de San Juan María Vianney en la Basílica de Ars

San Pío X lo beatificó en 1905 y lo puso como modelo para el clero parroquial. En 1925, el papa Pío XI lo canonizó. Su fiesta se celebra el 4 de agosto. El Beato Juan XXIII escribió una encíclica en 1959, Sacerdotii nostri primordia, en la cual realza, en el centenario de la muerte del Santo, las virtudes primordiales de todo sacerdote: el sacerdocio, la oración, la eucaristía y el celo apostólico. Cincuenta años más tarde, el papa Benedicto XVI proclamó un año completo conmemorando los 150 años de san Juan María: del 19 de junio de 2009 al 11 de junio de 2010. Nombrado patrono de todos los sacerdotes católicos, este año fue llamado el Año sacerdotal.

Sacerdotes en Roma en la Clausura del Año Jubilar