Santos Joaquín y Ana con su hija, Nuestra Señora
Hoy, 26 de julio, la Iglesia celebra la memoria de los bienaventurados padres de Nuestra Señora: Santos Joaquín y Ana. El culto de ambos esposos apareció muy pronto en las comunidades cristianas, siempre unido al culto a su gloriosa Hija, la Madre de Dios. Santos Joaquín y Ana formaron un matrimonio ejemplar, ya que sobre ellos recayó la responsabilidad de educar a Nuestra Señora. Numerosos templos en todo el mundo están dedicados a su piadosa memoria.
Iglesia Parroquial de Santa Ana y San Joaquín, Puerto de Roquetas de Mar (Almería)
En nuestra Diócesis también cuentan con numerosas iglesias, por ejemplo la Iglesia Parroquial de Santa Ana y San Joaquín en el Puerto de Roquetas de Mar. O la Iglesia Parroquial de San Joaquín en Garrucha. O la Iglesia Parroquial de Santa Ana en Íllar.
Finca de Gatuna donde se sitúa la Ermita de Santa Ana
En Alhama se veneran sus imágenes en la Ermita de San Antonio de Padua. También existe en la Sierra de Gatuna una Ermita dedicada a Santa Ana de muy bella factura.
Una imagen antigua de Santa Ana del Norte de España, quemada sacrílegamente durante la Persecución Religiosa de los años treinta
En nuestra Iglesia Parroquial de San Nicolás de Bari se veneraba una imagen de Santa Ana de mucha devoción, pero hace setenta y cinco años fue sacrílegamente destrozada de modo salvaje. Precisamente el miliciano que la profanó era hijo de una de las devotas de Santa Ana más señaladas. De este modo quiso castigar cruelmente a su abnegada madre, pobre viuda que encontraba todo su consuelo en encomendarse a Nuestra Señora.
Postal del siglo XIX de la familia de Nuestra Señora
Los padres de Nuestra Señora son los abuelos de Cristo. Por este motivo el Beato Juan Pablo II quiso dedicar la memoria de los abuelos del Señor a todos los abuelos cristianos del mundo. Benedicto XVI en Valencia recordó la importancia de los abuelos en el papel de la transmisión de la fe, cada vez más urgente porque los abuelos se ocupan más de los niños que sus propios padres.
Santa Ana enseña a leer a Nuestra Señora bajo la atenta mirada de San Joaquín
La Hermandad Sacramental de Nuestra Señora felicita a todos nuestros hermanos abuelos y a todos los de nuestro pueblo. Con nuestra oración rezamos por ellos y los animamos a que sigan trasmitiendo a sus nietos el tesoro de la fe. ¡Felicidades!
Grupo escultórico de Santos Joaquín y Ana con Nuestra Señora
ORACIÓN A LOS SANTOS JOAQUÍN Y ANA
Gloriosísimos padres de María Santísima,
amados abogados míos:
me alegro con vosotros de aquel consuelo que tuvisteis cuando,
después de muchos ruegos y oraciones,
os avisó el Ángel que habíais de tener una hija tan santa.
Miradme aquí postrado a vuestros pies,
os suplico me recibáis por vuestro humildísimo siervo
para que como tal os reverencie y ame.
Es verdad que no merezco esta gracia,
pero confío lo haréis por el amor de María Santísima,
vuestra benditísima hija,
y por los méritos de Jesús.
Acordaos de mi ahora,
y sobre todo en la hora de mi agonía;
asistidme entonces,
junto con Jesús, María y José.
Amén.
Nuestra Señora con sus padres
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